Carne de Reloj

Los vi a los dos, la noche del domingo en la puerta de su casa....
él más temeroso que ella, pero besándola con fuerza y sin pudor.
Un momento estático, donde sólo el ruido ambientaba la realidad y el nervio de él.

Ella calculadora, con la razón por delante preguntando (¿que mejor arma puede tener?),
llevando a cabo lo que algún día le enseñaron "pregunta y abriras el mundo",
a sabiendas de que él conoce la misma teoría pero no quiere aplicarla....
-¿te gusto?- preguntó conociendo la respuesta obviamente hermética
-si nos dejaramos de ver ¿que pasaría?- volvió a cuestionar
él acomodándose en su hombro como niño desprotegido dijo -te extrañaría-

No se cuanto tiempo los pinte con la mirada
bailando un tango con las afirmaciones de él y las dudas objetivas de ella
Todo ahi en el mismo lugar
mientras él cantaba -eres mi amiga-
y ella recitaba -si, sólo eso-.


Para todos los queridos lectores inteligentes que les gana la estúpidez a veces.

Posteado por maritsol el Monday, October 17, 2005 a las 4:55 PM | Permalink