Carne de Reloj

Es en los primeros semestres cuando el atinado profesor Payán aplica una peculiar dinámica donde los alumnos tienen textualmente que "SALVAR SU DÍA".
Digamos que tendrán que hacer una actividad que no realizan con cotidianidad o bien, hacer algo que implique riesgo o atrevimiento, más que físico, moral.
Desde que supe de la dinámica, la cual no aplicó en mi semestre, sentí el interes por salvar mi día y comenté el proyecto con mis allegados -no alumnos de la facultad-(dígase: amigos, amigas y novio en turno), todos me decían que sí, pero nunca se concretó. (Creo que en el fondo no les agradaba la idea)...
Y la verdad es que basicamente sólo quiero salvar mi día con tres actividades de inicio:
1) Introducirme en la fuente que está en el Parque "¿?" (olvidé el nombre, pero se ubica en la Mirador y Cuauhtémoc, a un lado del Auditorio Municipal).
2) Ir por la calle, detectar a un tipito visualmente agradable, darle un beso infantil (de ese que no implica lenguas) e irme caminando sin decirle nada...La intención es conocer la reacción. Porque ¿que es lo peor que puede pasar?... Que no le guste y me maldiga...Que en verdad se enoje...Dudo que tal acción me pudiera hacer merecedora de un fregazo.
3) Conocer el Silverados, sí sólo conocerlo, esto no incluye tener que bailar con algún individuo desconocido que porte texana y botas...
Tomaría las fotos de mis aventuras y las subiría al ringo... Son buenas mis ideas ¿no cree?... Al menos le darían un poco de novedad a mi rutinaria vida.
Sin embargo ¿que sucede cuando salvas tu día sin planear la actividad que lo salvará?...Permitame decirle que es de lo más divertido...Y el jueves pasado me ocurrió, después de que mi jefe me diera un descanso involuntario y me citara a la 1 pm. en la oficina...
Salvar el día empezó desde que no fui a la cita, ya que en cuestiones laborales soy tan responsable que no haber ido a trabajar fue una sorpresa propia y de agenos.
A las 12:30 pm, como si supieran lo ocurrido, me llamaron Fabiola y Sergio con la intención de botanas, cervezas y maldecir los amores que el carajo se llevó...Accedí contenta por los tres puntos antes mencionados y segura de que eso era algo que cambiaba mi rutina.
Con Sabritas, dos sixes y nombres que omitiré por salud mental, tomamos el rumbo de "El Fresno" (ejido o pueblito ahora pintoresco por las lluvias), cuando un letrero de "Zona Arqueológica a 13 kilómetros", nos asaltó y con ello la intención de conocer dicha zona... Mi celular sonó y no era mi jefe reclamándome el plantón, sino un individuo que conoce desde pequeño el área en que yo me encontraba... El asunto pintaba mejor, pues contada precisión me pareció una señal de que nuestro camino debía continuar; además de que éste tipito ya me había contado de unas pinturas rupestres.
Debido a la señal Telcel ¿todo México es territorio Telcel?, ¿el Fresno es México?, total que la llamada se perdió; pero los tres aventureros continuamos durante 40 minutos avanzando por camino difícil en el rápido y furioso auto de Sergio.

MARITSOL: -Esto parece película de terror, donde tres amigos se adentran en el bosque, se encuentran con un asesino serial con máscara y mueren colgados de árboles-
SERGIO: -Lo bueno es que siempre se salva el que va manejando, jejeje-
MARITSOL: -Yo tenía entendido que la que estaba más "buena" se salvaba ¿no?...Creo que ya valieron madres los dos-

Sin embargo no todo fue miel, el Neon ya no pudo avanzar más debido a una zanja que era humanamente imposible de superar, -bueno para un Neon era humanamente imposible-... ¿Usted hubiera considerado siquiera remotamente la posibilidad de regresar, después de casi una hora de camino en auto?
Pues la Fabiola con todo y zapatos nos siguió, maldiciendo el hecho de que ninguno de los tres contaba con una cámara para tomar fotos.
FABIOLA: -Ni la reportera, ni el fotografo traen cámara!!!!!!!!!!!! tontos, tontos, tontos-
Multiplique esta frase por mil y es lo que escuchamos durante nuestro camino, que ahora era a pie... Encontramos a un ranchero que advirtió todavía nos faltaban caminando unos 40 minutos o más... No importando SEGUIMOS Y HASTA CARGANDO LO QUE QUEDABA DE LOS SIXES
El sol empezó a hacer de las suyas, como sabe hacerlo en nuestro querido shiwas y Fabiola lucía loka por la presencia de vacas en el camino...¿Le parece a usted lógico que alguien tema a las vacas, con aterrado pavor?. Descubrí algo nuevo de mi amiga... LE ATERRAN LAS VACAS
Nos topamos con cientos de ellas, que a duras penas nos miraban si quiera... Cuando mi ánimo empezó a decaer, encontramos como una luz en el túnel a unos trabajadores (omitiré empresa a la que pertenecen), sin embargo nuevamente nos advirtieron que nos faltaban "pelada" unos 30 minutos caminando.
Pues los jóvenes tercos CONTINUARON, Fabiola maldiciendo lo de la cámara, los zapatos de tacon bajo y yo el sol....
Cuando todo parecia perdido, los trabajadores volvieron en su gran camioneta o camión de trabajo blanco, que resplandeció en mi corazón como el mismo Dios cuando pise la tierra.
MARITSOL: -Amigo, que rollo, va para la zona arqueológica ¿verdad?-
TRABAJADOR: -Súbanse, pero sólo vamos un rato, ustedes sabrán si se quedan-
Ni tardos ni perezosos subimos en chinga loka, después de tanto caminar y tanto sol.... ¿En medio del pesar, cual podría haber sido la segunda esperanza?
Uno de los jóvenes trabajadores que brincaba involuntariamente ante tanta piedra, fumaba con singular alegría un churro y ese aroma a mota tan peculiar nos inundo las narices y a otro la sonrisa...El hombrecillo como buen cholo de la Rubio (según me contó) nos ofreció a todos y uno dio llegue.
..........por fin la mentada zona arqueológica donde las pinturas rupestres están casi invisibles ¿tanto caminar sólo para eso y para tomar fotos borrosas en nuestros celulares?
Duramos solamente 20 minutos, después regresamos a la parte trasera del camión, con un sol que ahora si estaba más animoso, apestando a mota y mariados hasta la chingada, hablando tarugadas y yo jugando sola a que duraba más de cinco segundos sin caerme al piso metalico y caliente del camión....
Fabiola solo se cuidaba el ir y venir de sus niñas riendo sola, Sergio otra vez reía a lo pendejoooooo, pero meramente a lo pendejo y yo seguía jugando, mientras todas las risas: las de Fabiola, Sergio y El Churro se me fundían.

EL CHURRO (joven trabajador mariguano): -¿Neta no quieres? en serio tengo más, no te awites-
MARITSOL: -En serio no, muchas gracias, pero no fumo-
EL CHURRO: -Hay, hay que fresa. A poco nunca la has probado?-
MARITSOL: -No me pega chavo!!! y eso es culpa de no saber fumar ni tabaco-
SERGIO: -Es que ella es de tachas y drogas duras-
MARITSOL: -Hace mucho que maté a un perro y ¿ahora soy mata perros?... Naaa la Patricia Mercado y mi papá también cuando estaban en la Universidad-
FABIOLA PONE UNA JETA INTERMINABLE, COMO LA QUE PONE SIEMPRE QUE HABLAMOS DE SEXO, DROGAS Y ROCK AND ROLL

Asi de sencillo, ¿me entendió los pasos para salvar su día?

Posteado por maritsol el Tuesday, August 29, 2006 a las 5:32 PM | Permalink